En la versión oficial difundida por la prensa israelí, el 
                ejercicio estuvo destinado a preparar a la población para una 
                eventual nueva guerra en la región,  y fue conducido 
                por la Comandancia de Defensa Civil del Ejército israelí, cuya 
                misión es la de asistir y rescatar a la población civil en 
                caso de guerra o desastres naturales.
  
                
                Israel, listo para 
                la guerra
                
                
                Israel intensificó sus maniobras militares y 
ensayos armamentísticos luego de que, en enero, el primer ministro de Israel, Ehud Olmert, dijo que 
                su país no se arriesgaría a otra "amenaza existencial" como la 
                del Holocausto perpetrado por los nazis en la Segunda Guerra 
                Mundial (1939-1945).
                
                
El final del 2006 y el principio del 2007 se destacaron por una 
escalada de cruces agresivos entre Irán y el eje Washington-Tel Aviv-Europa, a 
partir principalmente de la conferencia sobre el Holocausto realizada en 
Teherán y el "lapsus" de Olmert admitiendo que Israel es una potencia nuclear.
                Luego de que, en febrero pasado, la prensa israelí diera cuenta 
                de movimiento de tanques y tropas sirias en la frontera, el 
                Ejército israelí efectuó grandes maniobras en el Golán, 
con unidades de infantería blindadas, artillería y aviación. "Existe una clara 
tensión en la frontera sirio-israelí", afirmó a la agencia AFP una fuente 
militar judía por esa fecha.
                Según el diario Haaretz, la 
                inteligencia militar israelí "pone el acento sobre todo en los misiles y 
los cohetes de largo alcance" que poseería Damasco.
                
 
  
                El ejército sirio estaría equipado masivamente con misiles Scud-D 
de 400 km de alcance, con cobertura sobre la mayor parte del territorio israelí, 
                "para compensar la debilidad de su fuerza aérea", según un 
                portavoz militar citado por
                
 
  
                
  
Haaretz.
                
  
El mismo diario israelí
Haaretz encendió la alarma, el jueves 22 de febrero, al informar que el ejército sirio 
realizaba un movimientos de tropas "sin precedentes" cerca de las alturas 
del Golán, territorio disputado desde que Israel lo conquistó en la Guerra de 
los Seis Días, en 1967.
                
                
  
Para los analistas 
                estadounidenses, un ingreso del ejército de Siria en Líbano (un ejército bien equipado 
y con excelente poder de fuego) abriendo un tercer frente contra Israel, 
podría precipitar la intervención militar norteamericana, lo que conllevaría el 
principio de una guerra generalizada en la región, con Irán jugando un papel 
clave en el tablero.
                
  
El parlamentario sirio Mohammed Habash,en declaraciones a la TV Al-Arabiya 
aseguró que no ha cambiado el despliegue de fuerzas militares a lo largo de la 
frontera. Pero destacó que "Siria está preparada para cualquier situación 
(que pueda surgir)", y advirtió que si Israel "hace algo estúpido pagará un 
precio alto".
                
  
Por su parte, el  general de reserva israelí Amos Gilad, consejero del 
Ministerio de Defensa, no desmintió ni confirmó la información, pero dijo: "El 
hecho de que Siria refuerce su capacidad militar no significa que nos va a 
atacar mañana, pero hay que estar listos".
                
  
                  El nuevo simulacro
 
                de defensa ante un ataque masivo, parece indicar que Israel está 
                listo para la guerra.