Abbas se declara abierta y públicamente comprometido con las negociaciones con Israel y con una solución pacífica del conflicto, mientras que Hamás no acepta reconocer a Israel ni renunciar oficialmente a la violencia, precisa la cadena.

Para la BBC la pregunta es cómo lidiar con esta situación. El punto de partida al analizarlo es partir de la base que lo que acontece en los territorios palestinos, tarde o temprano, incide también sobre Israel, agrega.

El problema -dice la cadena- es que por la dinámica interna del conflicto israelo-palestino, la situación suele darse de modo tal que cualquier paso israelí que abrace demasiado abiertamente a Abbas, podría resultar contraproducente.

La portavoz del Premier Ehud Olmert, Miri Eisin, dejó en claro días atrás "el apoyo a los moderados en la Autoridad Palestina, aquellos que tienen la visión de un Estado palestino junto a Israel, aquellos que desean concretarlo a través de negociaciones y no de violencia".

El diputado árabe israelí Ahmed Tibi advirtió que las "medidas israelíes destinadas a fortalecer a Abbas, tendrán el efecto contrario desde el punto de vista de los palestinos y terminarán fortaleciendo a Hamás a expensas de Abbas".

El primer ministro israelí pidió a sus ministros no pronunciarse sobre la crisis palestina.
Concretamente, les dijo que no se pronuncien públicamente sobre la crisis palestina, ya que ello podría ser perjudicial.

Eso, además de la problemática de ser una intervención directa, desataría una gran polémica dentro de Israel.
Medidas israelíes destinadas a fortalecer a Abbas, tendrán el efecto contrario desde el punto de vista de los palestinos y terminarán fortaleciendo a Hamás a expensas de Abbas, señala la BBC.

De todos modos, el tema central es cómo se puede ayudar en la práctica al sector considerado más moderado - el Presidente Abbas - sin presentarlo como alguien que responde a dictámenes o deseos israelíes, agrega.
Según la cadena británica en español, se había hablado de permitir el ingreso a los territorios palestinos, de la Brigada Bader, una fuerza palestina que se halla en Jordania y que es considerada favorable al "rais".

Su llegada, para suponer un aporte real, debería estar acompañada de armas, que Israel debería permitir que les sean entregadas a esos efectivos palestinos.

Una forma concreta de fortalecer a Abbas sin que "parezca títere de Israel", es dar pasos con los que se convenza al pueblo palestino que por la vía de la negociación y la convivencia, alcanzan mucho mayores logros que mediante la violencia o el rechazo que constituyen la línea de Hamás.

Para ello, es imperioso volver a negociar, lo cual significaría también liberación de presos, medidas que alivien la presión de los controles y bloqueos carreteros y quizás hasta la reanudación de los permisos de trabajo a palestinos en Israel, analiza la BBC.

El problema es que ello chocará siempre con una pared, mientras la mayoría en el Parlamento palestino siga siendo de Hamás, se lamenta la cadena.

Y agrega que Abbas puede de hecho negociar con Israel como jefe de la OLP y no tanto como Presidente palestino- explicando que la OLP es una representación mayor que incluye también a los palestinos del exterior.

Pero mientras en el terreno continúa la guerra interna y la dinámica palestina toda se ve alterada, resulta difícil imaginar un escenario de verdadera negociación, concluye la BBC.

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