Relájense, aspiren "energía positiva", no se carguen de "negativismo" con los
problemas del mundo (estar bien con el universo significa "estar bien con uno
mismo"), no se depriman con sobrecargas de reflexiones cósmicas inútiles, no
filosofen pensamientos críticos, actúen en positivo, respiren "buena onda", ejerciten
la "autorrealización creativa", cultiven el cuerpo, cultiven los gustos,
cultiven la amistad, cultiven la familia, cultiven la moda, cultiven "siempre en
positivo", sean amables, no rompan la corriente, dejen que las cosas "fluyan",
naturalmente, sin preconceptos, sin contaminantes, sin ideologías de cambio
preestablecidas, sean libres, supriman conflictos agotadores, y únanse
solidariamente en la gran red planetaria de "Gran Hermano": El que piensa
(y soluciona) los problemas del mundo por todos nosotros.
Por Manuel Freytas (*)
manuefreytas@iarnoticias.com
Un día el
individuo-masa (femenino-masculino) se despertó y dijo: Miro la televisión y
luego existo.
Y otro
día, se despertó y dijo: Utilizo la Internet y solo existo por las redes
sociales.
Sin
saberlo, había ingresado a la era del "homo videns", finalmente proyectado
(y realizado) a través de las ondas del ciberespacio desplegadas como una
gran telaraña cazadora de cerebros.
Su mundo
se convirtió en una pantalla: Me conecto por la TV-pantalla, me convierto
en "solidario virtual", y realizo mis sueños por la Internet-pantalla. La vida y
los proyectos siempre empiezan por un sueño. Así lo han sostenido históricamente
los ídolos del cine de Hollywood. Que han surgido de una pantalla.
Fuera
de la pantalla: El mundo es dudoso. Está lleno de "teorías conspirativas",
de dudosas hipótesis sobre el "bien y el mal" implícitos en la naturaleza
humana. Fuera de la pantalla, el mundo está poblado de "política" y de
"ideología", de críticas saturadas de falsas certezas. Quiero "ser yo", no un
ente manipulado por la política y las ideologías. No hay malos ni buenos, no hay
sistema dominante, sólo estamos nosotros y nuestras circunstancias.
Mejor
la pantalla (del TV y la compu): Me tranquiliza, me informa, me conecta con
un mundo de imágenes que "valen más que mil palabras", la TV
"muestra" la realidad casi sin palabras, y la Internet me permite contarla,
sin intermediarios, sin que nadie me diga lo que debo hacer y pensar.
Vivan
las redes: Vivan los SMS, vivan los contactos en tiempo real, viva la
interactividad, viva la comunicación planetaria sin limites, viva Twitter, viva
Facebook, viva yo y mi circunstancia, vivan todos los que trasformaron el
mundo con la tecnología digital, vivan los que posibilitaron nuestro tránsito
del mundo viejo al mundo nuevo. Vivan los que inventaron la pantalla: Fuente de
toda razón y justicia.
Y de
pronto, llegó Gran Hermano.
Pregunta: ¿Qué hace un adicto
a la pantalla tele-informatizada (el mundo fashion de los Twitter y los
Facebook) en su tiempo libre?
Respuesta:
Vota y consume.
Consume
productos, consume ropas, consume espectáculos, consume cultura, consume
alienación informatizada, consume "días
de la madre", consume casamientos y divorcios pagos, consume navidad, consume ideas "fashion",
consume vacaciones guiadas, consume ídolos faranduleros convertidos en
estereotipos sociales de los jóvenes, consume individualismo existencial,
consume noticieros y programas de TV que esconden a los dueños del poder,
consume teorías y discursos que ocultan el origen de la riqueza y la pobreza,
consume información que tapa la explicación de porqué tres mil millones de seres
humanos viven en la pobreza o en la indigencia extrema, consume el espectáculo
de la riqueza (de la minoría) que vive por los miles de millones que no consumen, consume y vota en elecciones periódicas
con políticos ofertados
como un producto en la góndola, vota y elige gobiernos títeres de los bancos y
trasnacionales que manejan la economía y el destino de la humanidad,
consume y vota encuestas orientadas a preservar la sociedad de consumo y
la "gobernabilidad" del sistema, vota, vota, y vive, en definitiva según
las sabias enseñanzas y directivas de "Gran Hermano" que le habla desde las
pantallas informatizadas del sistema capitalista globalizado.
Ensayo de
catástrofe
¿Saben lo
que pasaría si las mayorías planetarias dejaran de votar y de consumir
productos superfluos (el 70% de la oferta de la sociedad de consumo
capitalista) y sólo consumiera aquellos esenciales para su supervivencia?
Como
primer efecto, las bases del "consumismo" masivo (la piedra
angular del
funcionamiento de la rentabilidad y de la economía capitalista a nivel
planetario) se derrumbarían y el sistema colapsaría por "sobreproducción" a escala global desatando una
ola de desempleo y de conflictos sociales en todo el planeta.
Como segundo efecto, si las mayorías
dejaran de votar se derrumbarían las instituciones jurídicas y políticas
del capitalismo que quedarían "deslegitimadas", terminando con la
"gobernabilidad" y la "democracia representativa" del sistema capitalista
a escala global.
¿Qué pasaría si la humanidad
descubriera que vive dentro de un "sistema" (económico, militar, político
y social) que controla y depreda el mundo a partir de la destrucción de la
capacidad totalizadora del cerebro humano?
¿Qué pasaría si las mayorías
descubrieran que el "individualismo" es una estrategia de dominio (dividir para
reinar) que el sistema implementa para mantener a las mayorías en la ignorancia
y paralizar las luchas sociales colectivas en su contra?.
Miro la televisión y luego existo:
¿Quién programa los contenidos y los valores que difunde la televisión?
Utilizo la Internet y solo existo por
las redes sociales: ¿Quién controla y fija las reglas de juego de las redes
sociales?
¿Qué pasaría si el mundo entero
descubriera que su conducta está manipulada por medio del control mental
orientado a direccionar conducta colectiva con la ideología individualista?
¿Y si se descubriera que el ser
humano no es nada más que una mercancía viviente destinada a producir
rentabilidad capitalista a las empresas y bancos que depredan
el planeta convertido en un desecho apocalíptico que ya comienza a
estallar por todos lados?
¿Qué pasaría si se descubriera
que las catástrofes ecológicas no son fenómenos naturales sino hechos emergentes
(el calentamiento global) de la irracionalidad demencial de las empresas
trasnacionales que controlan los recursos naturales y los sistemas económicos
productivos sin planificación, y sólo orientados a la ganancia privada en todo
el planeta?
Posiblemente, si se descubriera la
estrategia subyacente detrás de la comunicación "individualista", Twitter,
Facebook y el resto de las redes sociales también sufrirían un Apocalipsis: En
vez de servir al "individualismo socializado" se convertirían en una herramienta incontrolable de la conciencia social a escala masiva.
Es lo que teme "Gran Hermano",
el que guía al mundo desde las pantallas informatizadas a partir de una idea
fuerza:
"Criticar y pensar el mundo desde una totalidad científica que le de sentido y explicación, es estar
fuera de la realidad. El compromiso con la concientización y las luchas sociales activas
por el cambio de un mundo injusto por uno más justo es pura "teoría
conspirativa". Bórrate: Ese mundo no existe. El mundo solo es como tú lo
percibes. El universo es un conjunto de imágenes sueltas que sólo adquieren
sentido dentro de los límites de tu conducta y de tu personalidad. Por lo
tanto, ¡Viva la revolución virtual! ".
Relájense, pónganse cómodos:
No hay necesidad de pensar ni de transformar nada en función social, "Gran Hermano"
piensa y transforma por todos nosotros.
Por lo menos, hasta que llegue el
Apocalipsis sin invitación.
(*) Manuel Freytas es periodista, investigador,
analista de estructuras del poder, especialista en inteligencia y comunicación
estratégica. Es uno de los autores más difundidos y referenciados en la Web.
Ver sus trabajos en
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IAR Noticias
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