ernán:
Petras, aprovechemos el tiempo que tenemos para actualizar la realidad. La
agenda sigue marcada con todo lo que sigue pasando en Haití y ahora además de la
presencia militar estadounidense masiva, se ha dado este episodio con supuestos
misioneros que se querían llevar niños haitianos.
Petras: Sí, es una práctica común de estas organizaciones religiosas,
mafiosas, que bajo el pretexto de ayuda humanitaria raptan a los niños o los
consiguen bajo pretextos falsos y después los venden a personas sin hijos por 20
ó 30 mil dólares. Es un gran negocio. Segundo, a veces los tratan mal e incluso
hay casos de tráfico de niños para pornografía, también otra forma de
explotación.
Hemos visto muchas experiencias en
Panamá, en Colombia y otros lados, donde llevan niños de las casas de huérfanos
bajo pretextos falsos y hay oficiales gubernamentales involucrados. En el caso
de Haití ahora hay miles de niños sin parientes y a algunas de estas
instituciones que meten mano supuestamente bajo una falla técnica los
arrestaron. Pero es algo más profundo y espero que haya alguna investigación de
todas estas redes humanitarias, supuestas organizaciones no gubernamentales que
están ayudando, que podrían estar involucradas en una red de tráfico de niños.
Hernán: Se habla de la
dificultad del gobierno haitiano para manejar esto porque pertenecen a
organizaciones que están entregando mucho dinero tras el terremoto.
Petras: Sí, algunas
organizaciones manejan mucho dinero. Como mencionamos la semana pasada, el
dinero no llega al pueblo; pasa por las organizaciones internacionales, las ONG
y otras organizaciones con grandes salarios, muchos vehículos 4x4 y después
termina en que apenas un centavo de cada dólar entra para ayudar a los pobres,
el 1%. Son las cifras que hemos recibido de que en los diferentes niveles de
tratamiento administrativo al final de cuentas son apenas gotas que van
dirigidas al pueblo. Todavía hay más de un millón de personas que ni siquiera
tienen una carpa
Hernán: Y todo esto en
medio del refuerzo militar por parte de Estados Unidos que se sigue reforzando y
extendiendo.
Petras: Pero hay que poner
este problema de militarización de Haití en un marco más generalizado. Quiero
enumerar lo que es el contexto: primero tenemos la militarización de Colombia
con las siete bases; tenemos el fortalecimiento militar en Honduras con el golpe
de estado; tenemos el fortalecimiento de las bases aéreas en Curazao violando el
espacio aéreo de Venezuela; tenemos una renovación de campaña golpista en
Venezuela, una campaña virulenta utilizando estudiantes privilegiados como
fuerza de choque y últimamente tenemos grandes provocaciones contra China. La
última, la venta de seis mil millones de armas a Taiwán, junto con la propaganda
sobre el separatismo y ahora la preparación de la visita de Dalai Lama del Tíbet,
que es otro separatista. Junto con eso, las denuncias que Clinton ha hecho de
China por la posición negociadora con Irán, donde Estados Unidos está preparando
una acción armada.
Juntamos todo eso ¿y qué decimos?:
hay una ofensiva militarista de Estados Unidos contra América Latina, Venezuela,
Honduras; hay una ofensiva militar en el Medio Oriente fortaleciendo a Israel,
con aumento de tropas en Afganistán; tenemos ahora las confrontaciones y
provocaciones contra China... Juntamos eso y debemos subrayar que hay una onda
militarista de Obama, particularmente en el presupuesto que frente a la crisis
aumentó 3,5 por ciento el gasto militar superando en 70 mil millones de dólares
el presupuesto militar. Ese es el hecho trascendente en este momento en la
política norteamericana.
Hernán: ¿Eso de alguna
manera lo ayuda a reactivar internamente la economía a Obama?
Petras: Bueno, la
reactivación de la economía tiene un enfoque que debemos enfatizar. Es decir,
las ganancias en el sector manufacturero están creciendo en una forma importante
a partir de la alta tasa de explotación, lo que los economistas peones del
capital llaman aquí "la productividad", en Estados Unidos creció seis por
ciento, casi un récord. Y este aumento de productividad significa que hay menos
obreros porque la tasa de desocupación oficial ahora es del 20 %, lo que quiere
decir que uno de cada cinco hombres entre 20 y 55 años no tiene trabajo.
Son cifras de Summers, el asesor
económico principal de Obama ayer en Davos. Declaró que hay uno de cada cinco
sin trabajo pero la productividad crece. Con menos obreros aumenta la
productividad y la tasa de ganancias de este trimestre está en camino a ser
récord. ¡Récord!
Según The Financial Times de
hoy, las anticipaciones de ganancias entre enero y fin de marzo van a ser un
récord histórico. Esa es la realidad. Cuando hablamos de crisis, la crisis es de
los trabajadores, los desocupados, los que forman la gran reserva que presionan
sobre las ganancias.
Aquí en California hay una huelga,
la más grande en las minas. Y los capitalistas simplemente reemplazan a los
mineros. Fueron buscando rompehuelgas, y queda así para bajar los salarios y
aumentar la productividad y a partir de eso superar las tasas de ganancias
normales. Esa es la función de la crisis. La crisis genera mano de obra
desocupada como una presión sobre los salarios y los que están con trabajo
tienen que intensificar su producción para mantener el trabajo.
Hernán: Obama ha hecho
gala por lo menos a nivel de discurso de tomar medidas para reducir las
ganancias de los altos banqueros y de los principales beneficiados del sistema
financiero. ¿Cuánto de eso puede ser cierto?
Petras: Eso es simplemente
simbólico, es una declaración porque estas medidas todavía no han entrado al
Congreso y los congresistas reciben muchas subvenciones de los banqueros y Obama
sabe eso; sabe que su propio partido recibió más dinero del sector de Wall
Streeet que los republicanos. Esas son palabras muertas, simple retórica como
válvula de escape para el pueblo que está enojado con las enormes ganancias.
Mira, las ganancias por el año
pasado superaron los 180 mil millones de dólares para cuatro empresas en Wall
Street. 180 mil millones de ganancias y eso se va a repartir porque el 80 % de
eso va hacia los directorios e incluso los inversionistas reciben el menor de
los ingresos. Eso significa que el discurso de Obama, en el mejor de los casos,
va a tocar un 10 por ciento de esta súper ganancia. Pueda ser que consiga entre
10 y 20 mil millones de estos 180 mil millones y eso es una cosa ínfima frente a
lo que están cosechando los grandes sectores financieros ahora.
Hernán: Petras, antes de
terminar, le pido un comentario sobre Afganistán donde Estados Unidos parece
jugarse además de la opción militar a librar una estrategia de cooptación o de
comprar a alguna parte de los talibanes.
Petras: Cada día recibimos
noticias de que algún colaborador de Estados Unidos, que supuestamente es algún
intérprete, un funcionario, dispara contra su superior. Es completamente no
confiable. Pueden pagarle a algunos dirigentes de tribus y supuestamente comprar
la lealtad, pero al final de cuentas toman el dinero y después siguen en la
oposición. La mayoría de las armas de los talibanes vienen de lo que compran a
los soldados afganos que reciben las armas de los Estados Unidos.
Es que no es simple comprar
conciencias porque allá la gente se siente ofendida por la intervención
norteamericana, tanto por la violación de sus tradiciones de comunidad,
religión, normas de vida, etc. Yo creo que esta táctica de comprar conciencias
no funciona en un contexto de ocupación tan terrible, donde cada día tiran
bombas sobre aldeas y otros lugares donde vive la gente común. Yo creo que esta
táctica no va a tener ni el mínimo éxito. Solamente es una táctica para tratar
de conseguir apoyo gubernamental, más dinero para el Pentágono, diciendo que van
a repartir este dinero como parte de una política ideológica. Pero hemos visto
en los últimos años que esta táctica no puede conseguir los resultados que
esperan.
Hernán: Petras, para
cerrar, le comentamos que aquí en nuestro país el presidente electo José Mujica,
acompañado por Danilo Astori, se apresta a protagonizar un almuerzo con unos mil
empresarios de todo el mundo. De transnacionales, multinacionales y algunas
empresas uruguayas en el hotel más famoso del balneario de Punta del Este, el
hotel de la cadena Conrad, donde lo que se va a recaudar por ese almuerzo va a
ser para un hospital de Maldonado. Parece que la flor y nata se va a hacer
presente en este almuerzo donde Mujica una vez más plantea que va a buscar las
famosas inversiones necesarias para dar trabajo. Además se está cerrando todo el
episodio de disputas internas en el Frente Amplio por las candidaturas a las
intendencias, donde fue desplazado en su aspiración a ser candidato el
socialista Daniel Martínez que fue Ministro de industria de Tabaré Vázquez.
Finalmente por acuerdo del grupo de Mujica, el MPP y el Partido Comunista se ha
elegido a una dirigente del PC, Ana Olivera que iba a ser Ministra de desarrollo
social. Esto ha desatado una pequeña crisis interna en las disputas por los
candidatos. En eso anda el partido de gobierno.
Petras: Bueno, estos
almuerzos son un pequeño costo que los empresarios van a pagar por las
millonarias concesiones y exoneraciones de impuestos que van a recibir. Por cada
dólar que van a gastar por un bife para el hospital, van a recibir cien billetes
en exoneraciones y subvenciones para las exportaciones. Ese pequeño precio, es
caridad, y el hecho de que tengan que buscar la caridad para construir un
hospital es un pobre comentario sobre la falta de una política pública orientada
hacia el mejoramiento del sistema de salud.
Eso es un gran salto del Siglo XIX,
incluso en los primeros años de ese siglo, donde los grandes latifundistas
construyeron pequeñas clínicas para los peones y como en esa época no tenían
políticas nacionales públicas el pueblo dependía de la caridad de los ricos.
Pasado el tiempo, con baches se introduce todo el sistema de salud pública
financiado por el gobierno para que la gente no dependa de la buena voluntad de
los ricos, y podían sentir con mucho orgullo que dependían solamente de la
iniciativa pública. Entonces Mujica está en la onda del Siglo XIX con este
sistema de caridad y sumisión a los grandes ricos de nuestra época.
Hernán: ¿Y en cuanto a
estas disputas internas?
Petras: Bueno, eso es así
siempre, es la única lucha. Han dejado la lucha de clases, han dejado la lucha
ideológica así que ahora lo que queda es la lucha por los puestos, para repartir
entre los activistas algún puestito, algún favor, etc.
Es una lucha de las máquinas de los
partidos para ubicar a algunos de su gente en algún empleo público, algún
nombramiento de asistente, asesor o lo que sea. Como no pueden satisfacer a las
clases populares, tratan de satisfacer a los integrantes de las máquinas
partidarias para mantener este proceso político que existe actualmente.