Los extranjeros fallecidos hoy en una explosión en
Pakistán, en la que hubo más de una decena de muertos, son tres miembros del
Ejército de EEUU, informaron a Efe fuentes oficiales, que descartaron que el
objetivo del atentado fuera un convoy humanitario.
IAR
Noticias
/
EFE
Los militares fallecidos se encontraban en Pakistán
formando a los miembros del cuerpo guardafronteras, explicaron un portavoz
militar y una fuente de inteligencia.
Estas fuentes concretaron que entre cuatro y cinco personas más perdieron la
vida en el ataque, entre ellas un soldado paquistaní y de tres a cuatro menores
estudiantes de un centro escolar femenino situado en las inmediaciones de la
explosión.
No obstante, fuentes policiales consultadas anteriormente por Efe elevaron el
total de fallecidos a 14: tres extranjeros, cuatro miembros de las fuerzas de
seguridad paquistaníes y siete alumnas del colegio.
La versión policial cifró además en 128 el número de heridos, la mayoría
escolares que quedaron atrapadas entre los escombros del centro educativo, parte
de cuya estructura se desplomó por la deflagración.
El ataque tuvo lugar en torno a las 11.15 horas locales (06.15 GMT), cuando
una bomba situada en un arcén de la carretera estalló al paso del convoy en la
zona de Koto del distrito de Bajo Dir, donde el Ejército lanzó la pasada
primavera una operación antitalibán.
Las primeras informaciones apuntaron a la muerte de tres periodistas
extranjeros en el atentado, versión que fue sustituida posteriormente por
trabajadores humanitarios sin determinar su nacionalidad, y finalmente por
miembros de la USAID, la agencia de EEUU de ayuda al desarrollo.
La presencia de fuerza militar estadounidense en
Pakistan ha sido objeto de numerosas suspicacias y controversias durante los
últimos meses.
El portavoz de la embajada de EEUU en Islamabad, Rick Snelsire, aseguró a Efe
que la legación difundirá próximamente un comunicado para dar su versión de lo
sucedido.
Tanto el primer ministro paquistaní, Yusuf Razá Guilani, como el ministro de
Exteriores, Shah Mehmud Qureshi, condenaron el atentado y ordenaron la apertura
de una investigación en sendas notas oficiales.
Según un informe reciente del Instituto de Pakistán para Estudios de Paz, en
torno a 12.000 personas fallecieron en 2009 en sucesos violentos en el país
surasiático y más de 3.000 de ellas, la mayoría civiles, a consecuencia de
atentados terroristas.