El responsable de seguridad sanitaria
del organismo, Keiji Fukuda, señaló que se trata de un "paso significativo"
hacia la declaración de una pandemia de gripe.
El nivel de alerta cuatro significa que el virus tiene la habilidad de
trasmitirse de persona a persona y que puede causar brotes a nivel comunitario.
Según explicó Keiji Fukuda, el virus se ha extendido demasiado como para que
la contención sea una opción viable y señaló que los gobiernos deben
concentrarse en mitigar los efectos y poner en práctica medidas para proteger a
la población.
Fukuda también señaló que los expertos no recomiendan cerrar las fronteras o
restringir los viajes, ya que esas medidas serían muy poco efectivas para
limitar la expansión del virus.
Previamente el secretario de Salud mexicano, José Ángel Córdova, afirmó que en
su país se está viviendo "el momento más álgido de la epidemia causada por la
gripe".
Córdova indicó en rueda de prensa que el número de fallecidos por influenza se
eleva a 149, de los cuales 26 son casos confirmados de gripe porcina.
Segun la prensa mexicana, este lunes las autoridades en México informaron que el
número de personas que han ingresado en los hospitales del país por neumonía
grave asciende a 1.995, de los cuales sólo permanecen hospitalizados 776.
El portavoz de la Organización
Mundial de la Salud (OMS), Gregory Hartl, reconoció hoy que este organismo
todavía no sabe por qué la gripe porcina está siendo más grave en México
que en otros países donde se ha detectado, al tiempo que precisó que la agencia
de la ONU no es partidaria de que se impongan restricciones de viaje o se
cierren fronteras.
"No entendemos por qué la enfermedad ha sido más grave en México", admitió Hartl
en rueda de prensa.
El portavoz sugirió que las primeras
víctimas pudieron no darse cuenta de que se habían contagiado de un nuevo tipo
de gripe que requería un tratamiento distinto, pudieron no haber recibido los
medicamentos necesarios hasta que ya era tarde o podrían estar infectadas con
otras enfermedades que redujeran su inmunidad al virus.
Según la OMS, toda la transmisión de la enfermedad hasta ahora parece haberse
producido de humano a humano y no por los animales o a través de otro
contacto.
"No hay ningún peligro en comer
carne de cerdo", subrayó Hartl. "Si se cocina el cerdo bien, si se cocina
toda la carne bien, se matan todos los virus", explicó.
La OMS tampoco conoce por el momento
donde comenzó el brote. "Todavía estamos buscando el origen de este caso,
todavía no sabemos dónde está, no sabemos donde se produjo la infección
inicial", reconoció el portavoz de la agencia de la ONU.
Por otra parte, dijo que el comité de emergencia de la OMS no volverá a reunirse
hoy para revisar el nivel de alerta por pandemia, que ayer se elevó al nivel 4
de un total de 6.
"Si el virus es un virus eficiente, si se propaga fácilmente entre humanos,
probablemente seguirá propagándose", señaló Hartl, quien aclaró que "todavía
estamos en la fase 4 porque no tenemos pruebas indiscutibles de que el virus sea
un difusor eficiente".
Asimismo, explicó que la OMS no es partidaria de que se recomienden
restricciones de viaje y el cierre de fronteras.
Las personas contagiadas, señaló,
podrían no mostrar síntomas en el aeropuerto o cuando lleguen a un paso
fronterizo, así que las limitaciones de viaje, como las que se impusieron
durante el brote de SARS (Síndrome Respiratorio Agudo Severo) no son efectivas.
"Los controles fronterizos no funcionan, las revisiones médicas no funcionan",
aseveró.
No obstante, recomendó a las personas
que se piensen en viajar a las zonas afectadas o salir de ellas, y que eviten
las multitudes y los medios de transporte público si presentan síntomas
similares a los de la gripe porcina. "Ciertamente si uno siente que está enfermo
no debería viajar, en ningún caso, a ningún sitio", subrayó.
Mientras, en Escocia, Reino Unido, dos personas con gripe porcina fueron
internadas en un hospital, y en España un joven portador del virus fue ingresado
en un hospital de Albacete, según el ministerio de Sanidad español.
En Estados Unidos se confirmaron otros 20 casos de gripe porcina, lo que
eleva el número de afectados a 40.
Por otro lado, en Canadá se han confirmado 6 casos en diferentes partes del
país.
También se están investigando posibles brotes en Nueva Zelanda, Australia,
Israel y Brasil.
Varios países están aumentando los controles a las personas que llegan de
México y en algunos se han reintroducido los escáneres que fueron utilizados
en emergencias médicas previas.
La gripe porcina es una enfermedad
respiratoria que afecta a los cerdos, y contra la que muchas veces se los
vacuna. Los brotes son comunes en los chiqueros, donde la enfermedad se torna
severa, pero rara vez fatal.
La OMS ha confirmado que al menos
algunos de los casos registrados en la última semana pertenecen a una
variación de la cepa H1N1, que no se había visto antes.
Ésta es genéticamente diferente al virus de influenza estacional H1N1 en seres
humanos, que ha estado en circulación por el mundo entero en los últimos años, y
contiene ADN propio de los virus humanos, porcinos y aviares, incluyendo
elementos de virus porcinos europeos y asiáticos.
La gripe porcina es un subtipo de la tradicional cepa H1N1 (influenza
estacional) que mutó de los cerdos a los humanos.
Sus síntomas son fiebre superior a
39 grados, que se presenta de manera repentina, tos, dolor de cabeza
intenso, dolores musculares y de articulaciones, irritación de los ojos y flujo
nasal.
La OMS insiste en que se deben intensificar las medidas de precaución: lavarse
las manos, no compartir vasos o cubiertos, taparse la boca y la nariz al
estornudar o toser, evitar tocarse los ojos, la nariz y la boca.
Generalmente los síntomas clínicos son similares a los de la gripe común, pero
también se puede presentar una amplia gama de otros síntomas, que van desde
infecciones asintomáticas hasta neumonías severas que pueden provocar la muerte.
A veces, las personas afectadas no muestran signos de haber contraído la
enfermedad y de todas formas son portadoras, y pueden contagiar a otros.
La cepa H1N1 fue la causante de una pandemia, conocida como la gripe española,
que se cobró unos 50 millones de vidas a principios de siglo XX.