ras permanecer la mayor parte de la sesión en territorio positivo, el
Promedio Industrial Dow Jones descendió 83 puntos, o el 1%, a 7.887; el índice
Standard & Poor's 500 perdió 7 a 844 y el Índice Compuesto Nasdaq subió 2 puntos
a 1646.
Poco después del mediodía, The Wall Street Journal informó que el director
general de finanzas de General Motors afirmó que la automotriz no tiene planes
de efectuar un pago de deuda de US$1.000 millones que vence el 1 de junio y que
depende de un exitoso cambio de deuda por acciones o la protección de los
tribunales para reducir significativamente su deuda en circulación.
Si bien la acción de GM ejerce una influencia limitada en el mercado, una
bancarrota podría tener ramificaciones más amplias para la economía y el mercado
bursátil. Muchos bancos son propietarios de bonos de la automotriz, cuyas
acciones cerraron con una pérdida del 0,6% a US$1,69.
Sin embargo, el gerente de cartera Uri Landesman, de ING Investment
Management en Nueva York, afirmó que está considerando comprar acciones
financieras que hayan registrado alzas en los últimos tiempos con la esperanza
de que conserven su impulso. La exposición potencial de algunos bancos a una
bancarrota de GM no está influyendo significativamente en sus deliberaciones.
"Creo que (el Gobierno) nos ha estado preparando para una posible la
bancarrota por algún tiempo", afirma Landesman. "Ciertamente no creo que sea un
acontecimiento positivo si eso ocurre, pero tampoco creo que sea tan negativo
para el mercado".
La percepción ha mejorado entre los inversionistas desde que el secretario
del Tesoro estadounidense, Timothy Geithner, afirmara el martes ante el Congreso
que la amplia mayoría de los bancos cuenta con capital más que suficiente, lo
que disminuyó la preocupación sobre los resultados de las pruebas de estrés que
el Gobierno está aplicando a los mayores bancos del país. El miércoles Geithner
dijo que recibía con beneplácito el que bancos reintegraran al Gobierno los
fondos de rescate.
Los resultados contables del sector financiero publicados el miércoles
volvieron a estar lejos de ser alentadores.
Morgan Stanley registró una pérdida neta de US$190 millones, o 57 centavos
por acción, durante el primer trimestre, comparada con el beneficio de US$1.430
millones, o US$1,26 por acción, del mismo período del año anterior.
La firma recortó, además, en un 81% su dividendo trimestral a cinco centavos
por acción. La acción cayó un 9% a US$22,44.
Bank of America, un componente del Dow, cedió un 5,7% a US$8,26.
Wells Fargo, por su parte, cayó un 3,4% a US$18,18, después que la firma
señalara que registró una ganancia neta de US$3.050 millones, o 56 centavos por
acción, durante el primer trimestre, un aumento del 52% frente al beneficio del
mismo período del año anterior.
GlaxoSmithKline, por su parte, señaló que su ganancia neta disminuyó un 13%
en el primer trimestre debido a las menores ventas de medicamentos con
prescripción. Las acciones de la empresa cayeron un 5,3% a US$29,29.
En el sector tecnológico, Yahoo ascendió un 0,7% a US$14,48. El portal de
Internet informó el martes que registró una ganancia neta de US$118 millones, u
8 centavos por acción, durante el primer trimestre, un fuerte descenso frente al
beneficio neto de US$537 millones, o 37 centavos por acción de hace un año. La
firma también anunció una reducción de cerca del 5% más de su fuerza laboral.
"Lo importante de estos informes de ganancias es que nadie ha sido atrozmente
bajista en su proyecciones como para desacelerar al mercado", afirmó Art Hogan,
estratega de mercados de Jefferies & Co. "Ciertamente estamos en una situación
en la que la senda de menor resistencia es hacia arriba".