n un acontecimiento que puede tener consecuencias para los
deudores de todo el mundo, desde empresas en Rusia y América Latina hasta
deudores hipotecarios en Estados Unidos, banqueros y operadores han expresado su
temor a que la tasa de interés interbancaria que se aplica en los mercados de
capitales de Londres, conocida como Libor, no es confiable y está sujeta a
manipulaciones.
La tasa Libor juega un papel clave en el sistema financiero
mundial. Refleja la tasa de interés a la que los bancos de todo el mundo se
hacen préstamos a corto plazo entre sí. Calculada cada mañana en Londres, la
Libor provee un indicador crucial sobre la salud de los bancos: sube en las
épocas de crisis y baja en los momentos de calma.
Su influencia va mucho más allá del sistema bancario. Las tasas
de interés de billones de dólares (millón de millones) de deuda corporativa y
soberana, hipotecas y contratos financieros se reajustan según la evolución de
la Libor.
La Libor ha pasado a ser tan importante en los mercados de
crédito que mucha gente confía en ella sin reservas. Las dudas acerca de su
confiabilidad "en realidad son un poco atemorizantes, si uno lo piensa a fondo",
dice Chris Freemott, banquero hipotecario de Illinois, que depende de la Libor
para saber cuánto le debe su firma, All America Mortgage Corp. al banco First
Tennessee por la línea de crédito que utiliza para conceder sus préstamos.
En los últimos meses, la crisis financiera ha disparado la
Libor, obligando a los bancos centrales de EE.UU. y Europa a inyectar cientos de
miles de millones de dólares en el sistema para mantener a flote a los bancos.
Sin embargo, las crecientes sospechas sobre la veracidad de la
Libor sugieren que los problemas de los bancos podrían ser peores de lo que
están dispuestos a admitir. La sospecha es que algunos bancos no quieren alertar
al mercado sobre cuán desesperados están por conseguir efectivo. El sistema
Libor depende de que los bancos digan la verdad sobre sus tasas de
endeudamiento. Si los bancos mienten, millones de deudores de todo el mundo
estarían pagando tasas artificialmente bajas sobre sus préstamos. Esto es bueno
para los deudores, pero podría ser nocivo para los bancos y las instituciones
financieras que les prestan dinero.
"Los efectos psicológicos y económicos que esto podría tener en
el mercado financiero a largo plazo son incalculables", dijo Scott Peng,
estratega de tasas de interés de Citigroup Inc. Peng calcula que si los bancos
son sinceros sobre sus costos de préstamo, la Libor a tres meses subiría hasta
0,3 puntos porcentuales.
La divergencia en la Libor parece pequeña, pero puede
representar una gran diferencia para los deudores. Por ejemplo, 0,3 puntos
porcentuales extra agregarían más de US$100 al pago mensual de una hipoteca de
tasa variable de US$500.000, o US$300.000 en costos anuales de intereses para
una compañía con US$100 millones de deuda de tasa variable. La tasa Libor a tres
meses en dólares cerró ayer a 2,716%. La tasa correspondiente en libras
esterlinas asciendió a 5,929%.
No hay todavía pruebas de que los bancos hayan proveído
información falsa, pero banqueros y otros participantes del mercado han pedido a
la Asociación de Banqueros Británicos (BAA), la entidad que supervisa la Libor,
que investigue si sus miembros están notificando tasas de préstamos reales,
según fuentes al tanto y documentos del gobierno.
Las dudas sobre la Libor comenzaron en noviembre, en una
reunión en la que el Banco de Inglaterra y representantes de los bancos
británicos debatieron la recientes turbulencias financieras. En un informe
reciente, el Banco Internacional de Pagos, una especie de banco central de los
bancos centrales, también expresó su inquietud ante la posibilidad de que la
Libor pudiera estar siendo manipulada. John Ewan, vocero de BBA, dijo que el
grupo está supervisando la situación. "Queremos asegurar que nuestras tasas sean
tan precisas como sea posible, por lo que seguimos atentamente las tasas
presentadas por los bancos", afirma Ewan.
El sistema Libor se creó en los 80, cuando los bancos buscaban
un índice de referencia que les permitiera establecer las tasas sobre los
préstamos sindicados, préstamos a empresas que normalmente pagan una tasa de
interés reajustable, la cual varía conforme a las tasas a corto plazo de
referencia.
Al vincular las tasas de préstamos a la Libor, que representa
la tasa que los bancos se cobran entre sí, los bancos intentan garantizar que
las tasas de interés que pagan sus clientes nunca caerán muy por debajo de sus
propios costos de endeudamiento. Los bancos normalmente fijan sus tasas de
préstamo a un cierto diferencial o spread por encima de la Libor. Una compañía
con un crédito decente puede pagar una tasa de interés de Libor más 0,5 puntos
porcentuales. Una hipoteca de alto riesgo subprime puede acarrear una tasa de
interés de Libor más 6 puntos porcentuales.