, y los misiles de largo alcance que
poseen otros países de la región, en segundo
La recomendación figura en un
documento -cuyo contenido ha difundido el diario Haaretz- y que el Ejército
entregará el próximo mes al Consejo de Ministros, como parte del análisis de la
situación para 2009 que anualmente difunde el Consejo Nacional de Seguridad.
Además el informe considera que
"Es imprescindible movilizar a la comunidad internacional y obtener cooperación
regional. La nueva administración estadounidense (de Barack Obama) es una
oportunidad para ello", sugiere el documento.
El texto señala el riesgo de que la Autoridad Nacional Palestina (ANP) se
derrumbe en 2009 y, en consecuencia, la solución de dos Estados para dos
pueblos, base del actual diálogo de paz lanzado en noviembre de 2007 en la
Conferencia de Annapolis (EEUU).
Por ello, Israel deberá "impedir" la
celebración de elecciones presidenciales palestinas en enero de 2009, "incluso
al coste de una confrontación" con su gran aliado, Estados Unidos, y con la
comunidad internacional, señala el documento militar judío.
El presidente palestino y líder de Al-Fatah, Mahmud Abás, rechaza convocar esta
consulta en esa fecha para hacerla así coincidir con los comicios legislativos,
en 2010. El movimiento islamista Hamás se opone a este cambio y el próximo enero
dejará de considerar a Abás como legítimo presidente palestino.
La cúpula militar israelí sugiere "derribar" el Gobierno de facto de Hamás en
Gaza si se "colapsa la tregua y vuelve el conflicto" a la franja.
Por el contrario, aboga por avanzar en el diálogo con Siria, "pese al alto
precio que Israel tendría que pagar" para sellar la paz con su vecino. Este
"alto precio" sería la devolución a Damasco de los Altos del Golán, conquistados
por Israel en la Guerra de los Seis Días de 1967.
A cambio, la paz con Siria generaría un acuerdo con Líbano, lo que
debilitaría el eje Irán-Siria-Hizbulá-Hamás.
La semana pasada, los
observadores de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) advirtieron
en su último informe que Irán dispone del suficiente uranio enriquecido para
fabricar una bomba nuclear, según publica el diario estadounidense The New
York Times.
El grupo de expertos de la AIEA analizó la planta nuclear de Natanz, la más
grande de Irán, donde afirman que este mes se han producido 630 kilos de uranio
poco enriquecido.
Con la cantidad de uranio enriquecido de la que ya dispone Irán se podría
conseguir una explosión equivalente a la de la bomba de Nagasaki en la Segunda
Guerra Mundial, según un científico del Consejo de Defensa de Recursos
Naturales, Thomas B. Cochran.
En un documento preparatorio, el director adjunto de la AIEA, Olli Heinonen, expresó
su "alarma" por el hecho de que Irán tenga en su posesión un documento que describe
el proceso de fabricación de lo que podría ser el corazón de una bomba nuclear.
Tel Aviv y la
Casa Blanca, en su última cumbre en Washington, y según reveló la prensa
norteamericana, manejaron la hipótesis de un ataque preventivo a las usinas de Teherán a fin de neutralizar lo que
denunció la AIEA: La
capacidad de Irán para construir ojivas nucleares, lo que lo tornaría inmune a
las presiones de EEUU y las potencias.
Tel Aviv siempre dejó en claro
que un Irán en posesión de armamento nuclear es la "máxima amenaza" para
su supervivencia y seguridad. Si bien el régimen de Teherán -como consigna el
informe de la AIEA- todavía no tiene la bomba, ya está en capacidad de empezar a
fabricarla.
Esa es la tesis principal de los
halcones militares israelíes que suscriben el documento de presión al
gobierno sionista difundido por el diario Haaretz.
Durante la campaña
presidencial en EEUU, el ex viceministro de Defensa, general Efraim Sne (un
vocero calificado de los halcones militares) envió un documento a los dos
candidatos a la presidencia de EE UU.
El informe incluía
ocho puntos en los que destacaba que "ningún gobierno israelí podrá aceptar un
Irán nuclear". "Cuando ellos estén a punto de conseguirlo, una operación militar
israelí será puesta sobre la mesa del Ejecutivo", indica. Por eso Sne propone
"la única opción que es equilibrada y que ahorraría derramamiento de sangre:
llegó el momento para una ofensiva diplomática norteamericana fuerte y
determinada, para movilizar Europa de verdad y aprobar sanciones verdaderas que
finalmente derriben el peligroso régimen iraní".
Si bien en los documentos
militares de los halcones israelíes, así como en las continuas advertencias del
gobierno sionista señalando la decisión de Israel de evitar "a todo precio"
que Teherán se convierta en una potencia nuclear, hay elementos de guerra
psicológica preventiva, los mismos generan una tensión creciente en Irán y en
todo el Medio Oriente.
En este escenario, una posible
respuesta militar de Irán a las "advertencias" del estado judío podría
precipitar lo que más teme el equipo de Obama: Una escalada bélica en
Medio Oriente, en medio de la peor crisis recesiva de EEUU.