El
diario suizo Tages-Anzeiger,
de Zürich sobre la situación en Zimmbabue tras las elecciones: “Justamente en
Zimbabue, el Reino del Mal, parece surgir la posibilidad de un cambio pacífico
y, en buena parte, democrático. Al dictador Robert Mugabe, aislado
internacionalmente, se le salió el control del aparato estatal. Las fuerzas
opositoras de Zimbabue han recibido el apoyo de los exilados y organizaciones
humanitarias. Una lección sale de esto: si la comunidad internacional no
quiere cosechar una tormenta, no debe sembrar viento. Hay que sembrar la
semilla de la democracia y el Estado de Derecho para que también pueda
germinar”.
Los amigos del dictador Mugabe
quieren sobrevivir
El periódico alemán Berliner Zeitung,
de la capital germana: “Robert Mugabe, de 84 años de edad, gobernó 28 años y
ahora no sólo carece de cualquier autoridad moral sino que de facto está
físicamente agotado: la victoria de la oposición es tan clara que, a pesar del
masivo fraude de votos, la comisión electoral del dictador no lo pudo declarar
como triunfador.
Pero aún persiste el peligro de que el soberbio anciano declare el estado de
excepción y ordene a sus militares atacar a la población. Pero él ya no tiene
todo el dominio sobre el aparato de poder – son muchos los de su partido los
que quieren sobrevivir más allá de la era Mugabe”.
Colombia: Dialéctica versus humanidad en la
guerrilla
El rotativo francés L'Union, de
Reims en la provincia de Champagne sobre los intentos de acceder a la
secuestrada por las FARC y enferma Ingrid Betancourt: “Todo es una cosas de
días. No podemos repetirlo lo suficientemente, Ingrid Betancourt, se encuentra
en peligro de muerte. Lo más importante ahora es que la misión de socorro
logre llegar hasta donde esté la ciudadana franco-alemana.
¿Será pedir lo imposible?
¿Es en la dialéctica de la guerrilla marxista (FARC) impensable salvar a un
ser humano que no comparte sus ideas? Desde luego que la situación es
extremadamente complicada y la acción de rescate (emprendida por Francia) es
muy riesgosa. Pero ahora lo que se trata es de llevarla hasta el final - sin
contradecirse… y sin desesperarse”